Crónicas Marcianas (road tripping parte II)
Los marcianos están hasta en el alumbrado público, en las tiendas de souvenirs, y las máquinas de Coca Cola. Tienen dos "Alien Zones," sí, dos. La número dos está a un lado del Alien Museum... of course!
Después de tomarnos fotos con todos los extraterrestres del pueblo (y de comprar pan dulce en una panadería mexicana) seguimos con el viaje... aquí analizando unas plantas marcianas que nos encontramos más adelante.
Hace una semana, cerveza en mano, recibí una invitación para ir al Grand Canyon. No me tuvieron que decir dos veces, el lunes aventé unos trapos en la maleta y arrancamos rumbo a Arizona (ups!). Nuestra primera parada, después de las muchas horas necesarias para salir del "great state of Texas," fue Roswell, Nuevo México.
Resulta que este simpático pueblecillo es algo así como "alien nation." Los Roswellianos afirman que en 1947 encontraron restos de una nave alienígena en un rancho en las afueras del pueblo. Desde entonces Roswell se ha convertido en atractivo turístico para todos aquellos amantes de las teorías de la conspiración relacionadas con seres de otros planetas.
Los marcianos están hasta en el alumbrado público, en las tiendas de souvenirs, y las máquinas de Coca Cola. Tienen dos "Alien Zones," sí, dos. La número dos está a un lado del Alien Museum... of course!
Después de tomarnos fotos con todos los extraterrestres del pueblo (y de comprar pan dulce en una panadería mexicana) seguimos con el viaje... aquí analizando unas plantas marcianas que nos encontramos más adelante.
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